Inversión cae y economía se debilita en 2S del sexenio: CEESP
Políticas desalentadoras, agresiones a organismos autónomos y cancelación de proyectos propician desconfianza en inversionistas
La economía mexicana no ha crecido conforme lo planteado por el presidente Andrés Manuel López Obrador durante el arranque de su mandato, si bien es cierto que la crisis económica causada por la contingencia sanitaria fue un detonante, el Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) aseguró que las políticas asistencialistas y las acciones implementadas para regular la economía también han influido.
“La inversión acumula una caída de 17% desde las elecciones presidenciales en julio del 2018, principalmente como consecuencia de la incertidumbre relacionada con la cancelación de proyectos productivos, su sustitución por otros de dudosa rentabilidad social y la narrativa constantemente agresiva frente a la inversión privada nacional y extranjera”, dijo el organismo asesor en materia económica del Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El CEESP aseveró que a las políticas desalentadoras para la inversión se suman los deterioros del sector salud y del sistema educativo; lo mismo sucede con las agresiones a instituciones como el Instituto Nacional Electoral (INE) y universidades públicas.
Números desalentadores
El arranque de la segunda mitad del sexenio no es más alentador. La organización dirigida por Carlos Hurtado López advirtió que la situación de la economía mexicana es complicada debido al estancamiento registrado y a la debilidad de diversos indicadores macroeconómicos.
“El rebote del 2021 no fue suficiente para reponer lo perdido por la pandemia, y mucho menos para que la economía lograra el nivel que hubiera alcanzado con el (ya bajo) dinamismo que tenía hasta antes del 2018”, dijo el CEESP.
Agregó que las estimaciones de crecimiento de las autoridades federales para el Producto Interno Bruto (PIB) se encuentran por encima de lo pronosticado por organizaciones autónomas como el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y el Banco de México (Banxico). Mientras que para 2021 el Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), realizado por el Inegi, anticipa un crecimiento de apenas 5.0%, el pronóstico del gobierno es de 6.3 por ciento.
“En este entorno, los pronósticos de crecimiento para este año se han ajustado significativamente a la baja, acercándose cada vez más al 2.0% que contrasta con la estimación oficial de 4.1%”, aseguró.
Otros indicadores que se mostraron a la baja en su último reporte fueron la Inversión Fija Bruta (IFB), que cayó 0.1% en su comparación mensual durante noviembre, y el consumo, que en el penúltimo mes de 2021 se mantuvo 2.8% por debajo de su nivel prepandemia. En enero de este año la inflación anual se colocó en 7.07%, sin embargo, la inflación subyacente, que refleja de mejor manera el cambio de precios, aumentó a 6.2%, la tasa más alta en las últimas dos décadas.
El CEESP también criticó la iniciativa de reforma constitucional del Ejecutivo en materia eléctrica, al considerar monopólica en favor de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), lo que implicaría un incremento de costos tanto en generación como en suministro.
Al respecto, sugirió que una modificación de leyes secundarios o la implementación de medidas regulatorias podrían dar solución al problema plateado por el presidente y serviría para reanimar la inversión privada.